Dieta para un Buen Vivir.

Por Alan Rafael Orantes Rivera


Somos seres integrados de una mentalidad inalcanzable e incomparable, el ser humano por si solo es un ente que vaga en el tiempo, habitando así en este y cambiándolo a voluntad; somos pioneros en tantas cosas y somos tan ignorantes en tantas más que es deber de cada uno aprender del día a día, desarrollarse así con sus semejantes para perfeccionar a las sociedades. Sin embargo, más allá de cualquier institución o cualquier sistema que creamos, seguimos siendo sólo humanos, limitados por el tiempo que corre en  nuestra contra, desgastando así lo perceptible ante la mirada, volviéndonos más iguales a nuestros antecesores.

Debemos tener en cuenta que mientras nuestro cuerpo se vence a merced del entorno azorado de nuestro hábitat lo imperceptible de nuestro ser se enriquece, aprendemos de las dificultades, llegamos más lejos y simplemente como humanidad buscamos nuevos objetivos; como seres pensantes dignos de nuestra época, debemos permitirnos abrir nuestros criterios ante lo que no se puede analizar de manera simple, debemos ser críticos de la verdad y cuestionarnos cada hecho de la vida cotidiana; es mencionado que somos hijos de una era virtual en la cual el acceso a la información, está siendo como una llama que arde sin control en las mentes frágiles creando falsas percepciones de lo que acontece.
La mente humana es un gran misterio, estamos dotados de razón pero no en todos los casos los individuos parecen explotar el potencial de la tan susodicha característica que nos diferencia de los demás animales, inclusive como acontece en el tiempo no siempre estar consientes de nuestra razón nos vuelve dignos de poseer moral ante las acciones que realizamos; guerras, crisis, violencia y demás escenarios en los cuales las estrategias de sujetos cuyo uso de razón se ve envenenado por intereses personales, teniendo por consecuencia la realización de actos imperdonables ante la mirada crítica de la humanidad.
Siendo un estudiante, no dotado de la razón suficiente para comprender el actuar de la humanidad pretendo tener la ansiedad en la mente por conocer y descifrar lo que cada uno de los individuos que encuentro en mi andar intenta expresar, teniendo por resultado el enriquecimiento de mis ideas, complementando así la mirada que tengo respecto al entorno que habito; nutrir el alma, enriquecer el pensamiento simplemente tener información que nos ayude a percibir de una manera más consiente los hechos que se suscitan en la actualidad, no limitando nuestra visión en un marco nacional  sino además poder estar actualizados con lo que sucede en materia internacional.
Somos más allá de ciudadanos de Naciones con intereses y riquezas diferentes, somos seres humanos los cuales compartimos como especie el interés por trascender ante el tiempo y perseguir la inmortalidad del pensamiento; a lo cual y en un sentido referente  a mi crecimiento como estudiante y en mi búsqueda por la trascendencia agradezco la oportunidad de enriquecerme  con la posibilidad de ser parte de esta travesía; el hecho de compartir diversos escritos cuyo objeto general es dotar a la audiencia de información que, sino en un ámbito de aplicación directa puede ser una gran aportación para la reflexión individual.

 Ser parte de este proyecto trae por consecuencia lograr ir detallando mi propio pensamiento para siempre otorgar temas que interesen y sean útiles en su apreciación.
La dieta para un buen vivir considero, es siempre ser crítico de la verdad, digiriendo la información cautelosamente sin dejar pasar ningún detalle digno de analizar con la posibilidad de elegir la conclusión y postura que queramos defender.

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