La Democracia Liberal como Factor Desintegrador de la Familia

 Por Eder Falcao Jiménez Macario
¿Qué es la democracia liberal y qué acontecimiento dio auge a este hecho? de  la que tanto se habla hoy en día, ¿Cuál ha sido la trascendencia del liberalismo? Aquella que se pregonó después de la Revolución Francesa, y posteriormente se puso en práctica después de la Independencia Norteamericana, y cómo esta ideología ha sido factor desintegrador de la familia.
 La Democracia Liberal que empezó a gestarse en el siglo XVIII, e impulsado por los pensadores ilustrados y pequeños burgueses, se fueron convirtiendo en la principal ideología para la mayoría de los sistemas políticos y económicos en  occidente, sus máximos exponentes y defensores aseguran y justifican que es el modelo de gobierno más justo para una sociedad, nación o país, etc. …”Para el  espíritu humano representó una confianza demasiado exagerada  inclinándolos al libre pensamiento y la crítica”(Blackeller:1993:40)

El inglés Locke sostuvo que “Los hombres han recibido de Dios, derechos superiores a todos las leyes, consistentes en la libertad e igualdad y propiedad”. Los gobiernos alineados a este sistema propagan por doquier que las ideas de Locke,  imperen en todos y cada uno de los países;  presidentes como: Barack Obama, David Camerón, Ángela Merkel, que representan autoridad e influencia en sus respectivas regiones, van con la consigna de que la mejor manera de alcanzar acuerdos es a través de la Democracia Liberal.
El término Liberal puede sonar algo alentador por el significado etimológico que representa la palabra libertad o libre elección, desafortunadamente su aplicación es totalmente opuesta a su teoría idealista; implícitamente la ideología es perversa, ambigua y compleja. Actualmente varios académicos, intelectuales, periodistas, políticos, y economistas, siguen luchando por una verdadera democracia digna e incluyente, para que el liberalismo político tenga apertura de gobernar equilibradamente a una sociedad, con diversos criterios e intereses diferentes. La práctica de esta teoría se ha encontrado plenamente en el sistema de gobierno llamado Democracia.
Se entiende que la Democracia busca conciliar, armonizar, negociar, y equilibrar, siempre buscando la justicia, sin embargo su aplicación es diferente a lo que pregona ideológicamente. El gobierno democrático vela por la seguridad del pueblo, de acuerdo a los intereses de la mayoría; el pueblo representa lo popular o la gran mayoría, y para la Democracia, es el pueblo el principal actor; para Platón la democracia debe cuidar de la familia, sin embargo la naturaleza de esta forma de pensar y de vivir es contradictoria, ya que la realidad nos muestra que con el liberalismo se ha ido perdiendo el vinculo familiar.

La Democracia que va encaminada hacia un Estado Universal, basada en la libre expresión, se ha convertido en el enemigo número uno de la familia, del nacionalismo y de la religión, por ejemplo en los Estados Unidos, los problemas de divorcios, anarquía de los hijos hacia los padres, surgen justamente del hecho de que sus miembros entienden la familia en términos estrictamente liberales.
Las protestas y manifestaciones en todas sus versiones son producto de los logros constitucionales de corte liberal, que han dado cabida a exigir de acuerdo a lo que marca dicha constitución, por ejemplo la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, en los últimos 10 años han fomentado leyes totalmente en contra de lo que es el núcleo familiar, entiéndase este como: padre, madre e hijos; contraer matrimonio con personas del mismo sexo y  con la libertad de adoptar  hijos. Por otro lado el divorcio exprés, es otro factor que influye directamente en la familia, y que es una ley con mucha práctica en la Ciudad de México.

Por lo tanto, con la Democracia Liberal en marcha como ente universal y homogéneo, está actuando como eje desestabilizador de la principal institución de la sociedad, la familia. La  poca intervención del Estado en los procesos de desintegración en la familia, es parte del liberalismo por la que se ha luchado, y que ahora está aumentando sus frutos, pensando que la libre decisión del ciudadano es lo mejor; sin embargo para el  mundo occidental, esto ha  representado un desgaste espiritual, emocional y  físico. 

Para los ideólogos e intelectuales del siglo XXI, siguen con la idea de que la mejor forma de gobierno, es el Sistema Liberal, este virus que se propaga todos los días, cada vez tiene más peso en la sociedad, y lo que parece ser la salvación de una nación, se ha  convertido en algo perverso, contradictorio, y desgastante. Los usos y costumbres de una sociedad se han quebrantado, así como su identidad, dando paso a la libertad como su ente globalizador.