El título de este artículo, aunque parece ambicioso, refiere solamente a la apertura de un tema al que se pretende dar seguimiento en este espacio de discusión. Refiere también a una crítica respecto de la cientificidad del conocimiento y de la construcción del pensamiento desde la misma.
El problema pues, se
encuentra en la centralización de lo que concebimos como conocimiento, a partir
de una postura científica y cómo a su vez excluimos las distintas cosmovisiones
o bien, formas de interpretar el mundo.
Y justo de esto último es de lo que se pretende hablar es esta primera
sección del tema, pues considero que muy pocos son los que han logrado
desprenderse de los ideales positivistas de la ciencia -y de esa centralidad
del conocimiento desde el hacer científico- a comparación de aquellos que aún
excluyen formas de pensar y de hacer conocimiento distinto “al de estos portadores de la verdad” (que en algunos casos, así se
han planteado a lo largo de los siglos).
Se debe reconsiderar la idea de ciencia, como única forma de
construir conocimiento, o mejor aún, se debe replantear la noción de
conocimiento que está limitada dentro de un paradigma científico y que, como se
mencionaba arriba, excluye cualquier otra forma de comprender el mundo, al no
estar integrada en dicho paradigma; pues cabe señalar que ésta idea también
está fundamentada en una base esencial de la
modernidad: “Orden y progreso”. Siendo de tal suerte que cualquier forma de
construir conocimiento, lejana a estos ideales, quede al margen de lo que para
algunos significa progreso humano,
aunque realmente signifique un desentendimiento de lo que somos como humanidad
y, del daño que también ha provocado esta misma con sus aspiraciones de
progreso. Con ello no quiero decir que <<todo>> lo que se ha
construido desde la ciencia haya sido en vano, o negativo, sino que debemos
plantear lo que se está construyendo y destruyendo desde esta forma de hacer
ciencia, considerando en esta misma reflexión, el daño natural, social y
cultural que hemos causado al aferrarnos a una forma de ver el mundo.
-Por ello, antes de hablar
de conocimiento, debemos ver qué postura estamos asumiendo al hablar de éste,
así como también debemos reconsiderar las distintas cosmovisiones. Porque si
no, nos limitaremos siempre a tachar de mediocres a toda persona que no logre
concebir el mundo desde nuestra postura cientificista, pese a que estamos
ignorando aquí, lo que realmente significa la multiculturalidad, que refiere a
las distintas formas de concebir el mundo y
por lo tanto, a las distintas formas de construir conocimiento.
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